Trabajar de forma más inteligente no tiene por qué ser más duro

El servicio de atención al cliente ha sufrido más cambios en los últimos cinco años que en los 35 anteriores. Debido a las mayores expectativas de los clientes y al crecimiento de los medios sociales, la imagen de las empresas está bajo el escrutinio público como nunca antes.

Por todo ello, sin duda, los empleados que reciben las llamadas cada día y hablan con los clientes son los que más influyen en la imagen de las empresas. Ni que decir tiene que un servicio al cliente de calidad empieza por una comunicación clara.

Pero en las empresas actuales hay que trabajar más para superar a la competencia. El equipo utilizado para esta forma crucial de comunicación le ayuda a mantenerse por delante de la competencia.

Hoy en día, las empresas saben que ofrecer una excelente atención al cliente es fundamental para fidelizarlo y convertirlo en promotor de sus servicios o productos. El uso de productos profesionales va más allá de su empresa y se extiende a sus clientes.

IEsto permite a las empresas controlar todo lo que ocurre durante una llamada, en relación con el volumen, el silencio, el tiempo de espera, etc. ¿Ha tenido que repetirlo un cliente por tercera vez? ¿Dónde pone su empleado el teléfono en silencio para buscar información? ¿Cuándo levantó la voz el cliente o guardó silencio? ¿Cuánto tiempo estuvo silenciado el cliente y cómo afectó esto a la conversación? Un hardware de telecomunicaciones de alta calidad ayuda a sus empleados a centrarse en el cliente sin tener que preocuparse por la claridad del sonido.

Gracias a este conocimiento, las empresas pueden supervisar fácilmente el rendimiento de sus empleados, formarles y apoyarles en áreas específicas e incluso cambiar los flujos de trabajo y los procesos para lograr el objetivo final: trabajar de forma más eficiente y, en consecuencia, ahorrar tiempo.